viernes, 6 de marzo de 2015

Mi casa

 
 
Y se hicieron cristales
de tu presencia rota
copos de sal oscura
componiendo fríos
un corazón inerme.
 
Y caen con cada lágrima
deshaciéndose...
en agua que antaño era
cálida hidromiel que daba
el sabor a mi boca.
 
Y ahora, tiempo sin tiempo
vivo en una casa,
en las afueras de mi misma.
Junto palabras como ramitas
del bosque, para hacer fuego
por si acaso me faltara calor.
 
O mi voz.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario